Tiempos de cobardía generalizada. La depresión como síntoma de época
La clínica de la angustia tiene un privilegio en los tiempos actuales en la medida en que se trata de una época caracterizada por el ascenso del objeto a al cenit social. Es una manera metafórica de decir que en nuestra civilización, donde antes había un significante amo, ahora está el objeto y éste suscita angustia. Lo que comanda la época capitalista es el objeto, adopte la forma que adopte, y en esta medida es que podemos pensar a la depresión como síntoma contemporáneo.
Para el psicoanálisis lacaniano, la depresión es consecuencia de que el sujeto haya cedido en su deseo. Es decir, se trata de una cobardía moral, una falla moral, en la medida en que el sujeto no se hace responsable de su propio deseo y del propio goce. La depresión en tanto síntoma de una época que lleva la marca del plus de gozar en el puesto del mando. Es decir, considero a la sociedad actual como solidaria a la depresión en la medida en que prima un discurso capitalista y un imperativo superyóico a gozar que no hace más que alejar a los sujetos de sus propios deseos. Es una sociedad donde la responsabilidad por el goce recae en cada uno, no hay Otro que nos justifique. El sujeto abandona la responsabilidad por su deseo y cede frente al goce. Por eso es que prefiero hablar de sujetos gozantes, en lugar de deseantes. Por lo tanto, ¿Goce y depresión son solidarios? ¿Podríamos decir que sostenerse en el goce se paga con depresión?